Escribir el blog no evita que me pregunten muchas veces cómo me encuentro. Si digo que estupendamente bien, miento. Si digo que con dolores de cabeza (migrañas) permanentes, digo la verdad pero me obliga a explicarme. Haga lo que haga, mal, mal, mal.
En este mismo momento mi cabeza comienza a revisar como ha sido el día. A las seis de la mañana, el dolor me ha despertado por quinta vez, a las ocho me he levantado y tomado el aloe para luego poder desayunar y evitar la acidez que produce mi estómago. De mi cabeza salían rayos que chocaban contra el cráneo para después diluirse por la habitación. Los oídos volvían a pitar, toda vez que me ponían todavía más nerviosa.
Si la cabeza bullía, el resto del cuerpo también reclamaba atención. Chirriaba sin contemplaciones como si hubiera sido apaleado. La espalda se había quedado rígida por el dolor que bajaba por la columna hasta la cintura. Para cambiar de postura, tenía que estirar el brazo a lo largo y tirar de el. Al final lograba cambiar de posición y, gracias al frio de la sabana en otro espacio, me sentía revivir momentáneamente.
El día no ha ido mejor, gracias a las obras del año pasado puedo pasar al salón y tirarme en un sillón a lo largo, sin presiones, también fresco y sobre todo firme. Veo pasar las horas a través de las ranuras del gran ventanal que me permiten sufrir la llegada del mediodía. No tengo hambre, pero toca preparar la comida. La thermomix me soluciona la vida y a las cuatro vuelvo al sofá para disfrutar de la tarde.
Siguen corriendo las agujas del reloj. Son las tres de la mañana, no tengo sueño, pese a los dos intentos por dormir desde las doce de la noche. Me levanto y cojo el ordenador. No es un día cualquiera de dolor, es el día diez de dolor sin cuartel.
Pd.
Cortar la cabeza no es solución
medicar permanente no es solución,
ignorar no es evita,
dormir obliga a despertar.
Yo sé que la migraña pasará,
que la cara se relajará,
que la espalda desbloqueará,
todo pasará.
Ánimo. Tu eres una campeona y una gran luchadora. El de arriba siempre nos ayuda,aunque aveces nos ponga a prueba.
Después de un día complicado, verás como seguro que se abre una ventana para seguir caminando sin la jaqueca, migraña y consiguiendo un sueño reconciliador… Xxxxxxx