La vida laboral nos obliga a cuidar la imagen. Los Dress Code (antiguas normas de vestir) guían con mayor o menor acierto y sobre todo, como ocurría en con el uniforme de colegio, simplifican la vida, acotando los metros lineales de armario dedicados a pantalones negros, azules y cuadros, camisas blancas y rayadas, así como vestidos negros multifunción. Las opciones de nuestro casual day nos permitirán los viernes optar entre el chino, el vaquero pitillo, campaña, recto o el bordado.